Este proyecto intenta interrogarse acerca de la posición del espectador en la cultura visual contemporánea. Para ello se utiliza alegóricamente su perspectiva desde una doble vertiente. Por un lado, desde su visión, esto es, desde lo que el espectador ve, ya sea la escena, la pantalla o el dispositivo de exhibición. Por otro, se utiliza la mirada sobre el mismo espectador, sobre su comportamiento o sobre el lugar que ocupa o se le reserva en los diferentes dispositivos.
De esta manera, a través del trabajo de más de treinta artistas, la exposición se articula en cuatro ejes principales: la apertura y clausura del espacio de representación (telones y escenarios); los públicos y las audiencias, haciendo especial hincapié en el espectador y el espacio de exposición-representación; la escenografía de la comunicación y de recepción del discurso (la conferencia como género); y los cambios de roles que hacen que el espectador se convierta en actor y que al mismo tiempo se confiese como tal ante el espectador.