Esta presentación de la Colección MACBA en el Nacional Museum of Contemporary Arte de Korea (Seul), es el resultado de la investigación que en los últimos años ha dado cuerpo a los programas del museo. Abarca el arco cronológico completo de la Colección, que se inicia en la segunda mitad del siglo XX y llega hasta nuestras días. Se incluyen obras d'artistas catalanes, españoles e internacionales de generaciones diversas. Se han estructurado según temas que expresan la tensión entre el clasicismo y el espíritu de ruptura en el arte de nuestro tiempo: la construcción de una modernidad alterada y resistente a los cánones culturales, estéticos y políticos anglosajones y eurocéntricos.
La idea de que el siglo xx fue el siglo de la imagen pereció hace tiempo. El siglo pasado fue precisamente la época en que la producción de imágenes pasó de competencia de los artesanos artistas a objetivo de industrias que utilizan poderosas maquinarias: la fotografía, el cine, el fonógrafo, la televisión y también la radio. Los medios impresos, lo mismo que ahora los digitales, multiplicaron la existencia y la circulación de imágenes de manera exponencial. Hasta tal punto fue así que con estas técnicas se llegó sobre todo a injertar en el baile de sensaciones propio del «mundo moderno» el sonido, la música, la palabra pronunciada y su sombra, la escritura.
La Colección MACBA recoge y desarrolla la hipótesis de una cultura artística inconscientemente verbal. Lo verbal no sólo es contrapunto de una materialidad inerte en las «artes visuales»; incluye también una cuña decisiva para hacer cambiar el paradigma de la representación y el papel del sujeto perceptivo en toda relación artística. El habla es acción irrepetible y única; se desarrolla en un aquí y ahora improlongables.
The Shadow of Speech habla denota un cambio profundo en el tipo de relación que establecen las obras de arte con nosotros, sus receptores, y en cómo nosotros vemos hoy que se relacionan entre ellas. Nos referimos al cambio de perspectiva en una de las condiciones básicas de toda obra de arte: en lo que respecta a su estatus material, las obras de arte pueden ser inertes y permanecer inalteradas en su materialidad a lo largo del tiempo, o bien pueden ordenárnoslo porque están fundamentadas en una duración particular. El tiempo, como cualquier otra materia de la que se componen, forma parte esencial de cierto tipo de obras. El recorrido que vamos a efectuar a través de las obras de esta colección que estamos reinventando nos ofrecerá numerosos ejemplos de las tensiones entre inercia y dinámica, y de cómo las rupturas conforman nuevas tradiciones.
Excesos y carencias de la modernidad, acercamientos y lejanías respecto al presente, entradas y salidas de lo real, las distintas fisonomías que ahora ofrece la Colección MACBA son un paisaje sembrado hace tiempo. En él aparecen discursos y obras que abarcan desde los nuevos clasicismos hasta incorporaciones aparentemente discordantes. Se irán acumulando relatos y materias que, dispuestos en forma de sedimentos, dejarán ver el pasado reciente sin dejar por ello de inventar futuros.