En una empresa abandonada (a la cual era difícil acceder) se consiguió instalar una gran máquina fotocopiadora (Xerox). La actividad consistía en hacer un libro a través de una acción colectiva en forma de ritual o misa, con el ambiente a oscuras (la única luz era la de la fotocopiadora), y con cuatro personas vestidas de blanco. Muntadas preparó un dossier-archivo de fotos prensa y publicidad, y entregó un álbum con 20 originales a cada uno de los participantes. Estos fotocopiaban cada ítem 50 veces. Los materiales fotocopiados se compilaban en una publicación de artista, que se repartió al público asistente.
Se conserva un telegrama que anuncia la acción, del cual se hicieron copias como invitaciones/flyers.